Por: Revista Semana
Un nuevo libro afirma que contrario a lo que todo el mundo cree, tener un hijo único puede ser la mejor opción tanto para él como para los papás.
Siempre se ha dicho que los hijos únicos son egoístas, caprichosos, consentidos y solitarios. Sin embargo, una teoría señala que no solo esto es un mito sino que tener un solo hijo podría ser la mejor opción para los padres del siglo XXI. Así lo plantean las psicólogas María Elena López y María Teresa Arango en su libro El hijo único: Consejos para la crianza de un solo hijo, resultado de ocho años de investigación en donde concluyen que muchos eligen esta opción para brindarles mejor educación y mayor bienestar económico.
Aunque en los países en vías de desarrollo apenas 15 por ciento de las parejas tiene hijos únicos, la tendencia es cada vez más a emular lo que sucede en los desarrollados donde esa cifra es de 45 por ciento. Esto sucede porque hoy las parejas planean su vida de forma mucho más racional. Además, las mayores exigencias económicas, las altas tasas de divorcio, el ascenso de la mujer en el mundo laboral y el impacto de la superpoblación han provocado que muchas familias lo piensen dos veces antes de embarcarse en un segundo hijo.
López y Arango encontraron estudios que afirman que los hijos únicos gozan de muchas ventajas frente a los que tienen hermanos. En primer lugar, no tienen que compartir el afecto de sus padres con otros por lo que casi siempre logran desarrollar una fuerte autoestima. Además, el ambiente en el que crecen es más tranquilo pues al no competir por los recursos con otros hermanos tienen menos peleas, lo cual no solo lo agradecen ellos sino los propios padres. Todo esto contribuye a que establezcan desde temprano una relación más cercana con sus papás, a que tengan una personalidad bien definida y mayor desarrollo intelectual.
De hecho, un estudio publicado en 2013 en la revista The National Bureau of Economic Research, en Estados Unidos, reveló que les va mejor en el colegio, tienen mayor coeficiente intelectual y se sienten más estimulados por sus padres. “Los hijos únicos suelen tener más oportunidades educativas y mayores recursos para estudiar. Además maduran antes de tiempo porque conversan con adultos desde pequeños y esto los ayuda a enfrentar mejor los conflictos”, dijo López a SEMANA.
Los papás también disfrutan ciertas ventajas al criar solamente a un hijo. La principal es que tienen menos niveles de estrés porque sienten que pueden dedicarles mucho más tiempo y no tienen remordimientos por tener un favorito, como sucede en las familias más grandes. “Si los padres conocen mejor los gustos y las preferencias de su hijo, eso les va a permitir apoyarlo de una manera más eficaz a lo largo de su vida”, explica Arango.
Pese a esto, las autoras señalan que estas ventajas pueden convertirse fácilmente en lo contrario si los papás no tienen en cuenta que requieren un tipo de crianza especial. La clave está en que sepan que la personalidad de su hijo depende exclusivamente de ellos y que deben mantener un límite para no sobreprotegerlo ni complacerlo excesivamente. Tampoco deben exigirle demasiado ni creer que siempre necesita compañía. “Es importante que comprendan que es una persona independiente y que deben organizar su vida de tal modo que le permitan crecer y desarrollar su propio mundo”, afirma López.
Todo lo anterior demuestra que la idea de tener hermanos no es una garantía para crecer en un mejor entorno y que tener un solo hijo es una opción igualmente válida a pesar de que culturalmente se haya privilegiado siempre al núcleo familiar conformado por la pareja y varios hijos. “La crianza del hijo único es un gran desafío y a la vez una experiencia gratificante”, concluye Arango.
Aunque para la gran mayoría de ustedes, estudiantes a quien va dirigido este blog, esté lejos el proyecto de ser padres, sería interesante conocer su punto de vista sobre el tema. Tal vez algunos sean hijos únicos o tengan varios hermanos. ¿Cuál es su caso? ¿Qué piensan los futuros padres de finales de la próxima década?
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarBueno soy hija mayor, tengo un hermanito pequeño de 13 , gracias a Dios mis padres nos han enseñado que "siempre son mejores dos que uno" y puedo dar por sentado de ello, ya que cuando éramos pequeños jugamos juntos, a veces yo le tenía miedo a determinado animal, y mi hermano no entonces él lo mataba y listo. Hemos aprendido muchos valores entre ellos el compartir, en mi casa no hay favoritismos y nos ayudamos y cooperamos, es más el objetivo es que nuestros padres no estén solos uno de los dos debe estar pendiente de ellos, mientras él otro estudia fuera de la Ciudad. Además en caso tal de que un hijo muriera bueno él otro ayudaría a sus padres en un futuro.
Los futuros padres tienen un reto ante si, ya que no es fácil criar hijos, en cada una de las etapas de la vida, pero con la ayuda de Dios se puede. A decir verdad estoy lejos pero por lo pronto es vital estudiar y después sacar adelante a mi hermano y cuidar de mis padres, con la misma paciencia que ellos tuvieron para conmigo retribuyéndoles todo lo trabajado.
Bueno en mi caso tengo un hermano menor y mis papas nos han dado lo necesario creo que nos han criado bien.Es una experiencia muy bonita tener con quien compartir muchos momentos,secretos,juegos ,etc. Personalmente me gustaría tener una familia con dos o tres hijos, no va a ser fácil pero tampoco imposible.
ResponderEliminarbueno desde mi punto de vista es un privilegio llegar a tener un solo hijo pues en el caso de mis padre somo 3 hijos y bueno siempre se presentan ciertos desacuerdos y fricciones en el hogar por la jerarquía que se da como hijo siempre con alguna preferencia de los 3 y es un reto diario tanto emocionalmente como económicamente
ResponderEliminarEn mi casa somos 3 hombres y una mujer que es la menor de todos , creo que mis padres nos han educado y formado de la manera correcta como la familia que somos aunque aveces hayan desacuerdos , pero es una experiencia muy buena el poder convivir con otros hermanos
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